En abril de este año, Casillero del Diablo se convirtió en el cabernet sauvignon más vendido del Reino Unido. Un logro que va de la mano de su alianza con el Manchester United, uno de los clubes más populares del mundo. Guillermo Tupper, desde Manchester.

(Artículo publicado en el cuerpo Vidactual de El Mercurio. Mayo del 2015)

Cuando era niño, el pasatiempo favorito de Denis Law era correr detrás de una pelota en su vecindario de Aberdeen (Escocia). Eran los años de la post-guerra y, por aquel entonces, su gran sueño en la vida era convertirse en arquitecto. Sin embargo, todo cambió cuando un descubridor de talentos lo invitó a sumarse al Huddersfield Town, un modesto equipo de la liga inglesa. “Tenía 15 años. Para mí viajar desde Aberdeen a Huddersfield era como ir a China, un viaje larguísimo”, recuerda. “No tenía aspiraciones de convertirme en un futbolista profesional. Simplemente ocurrió de una forma bizarra”.

A comienzos de los 60, Law llegó al Manchester United, un equipo que buscaba rearmarse luego de la tragedia aérea que cambió su historia para siempre. En 1958, y tras jugar un partido de la Liga de Campeones, el vuelo que trasladaba a la plantilla de los “diablos rojos” se estrelló contra el aeropuerto de Munich. Murieron 23 personas, entre futbolistas, cuerpo técnico y personal aéreo. “Matt Busby —el director técnico— perdió a la mitad de su plantel. Yo jugaba de mediocampista y él me puso de delantero, porque no tenía a nadie que hiciera goles”, asegura Law. “¡Yo no quería jugar ahí! Si el otro equipo domina el partido, el delantero queda ausente del juego. Pero tenía que hacerlo. Empezamos a marcar goles, obtener resultados y me quedé en esa posición”.

Considerado uno de los artilleros británicos más letales de todos los tiempos, Law fue uno de los puntales de aquel equipo del United que resurgió de las cenizas para ganar dos trofeos de Liga, una copa FA y la Liga de Campeones de 1967-68. Junto a Bobby Charlton y George Best, el escocés conformó la recordada “trinidad” de los mancunianos y, además, obtuvo el Balón de Oro de 1964. “Fue un tiempo muy divertido en nuestras vidas”, asegura. “El juego, la música, los Beatles, los Rolling Stones. Era un mundo distinto. Todavía pienso que la música de los 60 es mejor que la de cualquier otro período en la historia”.

Law es uno de los principales referentes históricos en el imponente estadio Old Trafford. Una estatua de él, junto a Best y Charlton, emerge en la entrada al recinto y su rostro aparece en las gigantografías de Casillero del Diablo, una de las líneas más antiguas y emblemáticas de la Viña Concha y Toro y auspiciador del United desde hace un lustro. Gracias a esta alianza, Law pudo visitar por primera vez Chile en diciembre pasado.

“Es triste que haya permanecido solo tres días. Fue un viaje en avión muy extenso, pero conocí a gente increíble. ¡Lo más sorprendente es que sabían más de la historia de Manchester United que yo mismo!”, afirma. “Si no quedara tan lejos, te aseguro que sería mi lugar favorito en el mundo”.

La cepa de los diablos rojos

En diciembre del 2009, las oficinas de Concha y Toro recibieron una propuesta inédita. Manchester United —un equipo con 659 millones de aficionados en el mundo, según una encuesta realizada por la agencia de investigación de mercado Kantar— le envió una invitación a Casillero del Diablo para ser auspiciador del club. Cuando sus ejecutivos analizaron los “pro” y “contra”, se dieron cuenta que tenían varias cosas en común. “Ellos son los diablos rojos y, nosotros, el vino del diablo. Ellos manejan mucho el concepto de ‘leyenda’ con sus ex jugadores y nuestro lema es ‘la leyenda del vino’”, cuenta Sebastián Aguirre, gerente de Marketing Vinos Premium de Viña Concha y Toro. “Hay muchas cosas que engranan bien”.

A partir del año 2001, Casillero del Diablo tuvo un crecimiento exponencial en sus ventas de la mano de un fuerte proceso de globalización de la marca. En abril de este año, se convirtió en el cabernet sauvignon más vendido del Reino Unido, alcanzando un 60% de crecimiento, tanto en valor como en volumen. Según datos de Concha y Toro, este resultado se logró entre la última semana de 2014 y el 28 de febrero de 2015, lo que significó un aumento de 240 mil a 390 mil cajas de 9 litros. A raíz de lo anterior, Casillero del Diablo superó en ventas a su par australiano Wolf Blass, en dicha categoría.

En los últimos años, la marca también ha crecido con fuerza en el mercado asiático, donde el United tiene una enorme base de fanáticos. Para promover su vínculo con el fútbol, la inclusión de leyendas del club como rostros publicitarios ha sido clave. Un ejemplo es el último spot televisivo protagonizado por figuras del plantel actual como Wayne Rooney. “Como el precio no es excesivamente caro, nos posicionamos como un best value en la categoría de vinos. La gente se va a la segura con la calidad y lo reconoce así”, concluye Aguirre.

Dwight Yorke: “Chile tuvo muy mala suerte en el Mundial”

“Mis recuerdos de esa noche son muy pocos. Lo único que me acuerdo es la celebración después que anotamos dos goles en un lapso de tiempo tan breve”. Invitado estelar de la cumbre de Casillero del Diablo en Old Trafford, el trinitario Dwight Yorke sonríe cuando le preguntan por aquella inolvidable final de la Liga de Campeones 98-99. Hasta el minuto 90, Manchester United caía por la cuenta mínima ante el Bayern Munich, pero lo dio vuelta con dos goles en los descuentos y se quedó con la copa. “Después del partido, tratamos de consolar un poco a los jugadores del Bayern. Todos estaban llorando, destrozados”.

Junto a David Beckham, Ryan Giggs y el capitán Roy Keane, entre otros, Yorke fue uno de los artífices de aquel equipo dirigido por Alex Ferguson que lo ganó todo a finales de los 90. Hoy, el retirado delantero le pone fichas a Chile para la próxima Copa América. “Alexis Sánchez es el jugador más destacado”, afirma. “En la última Copa del Mundo, Chile fue uno de los equipos más sorprendentes. En mis tiempos estaba (Marcelo) Salas, un delantero genial, y hoy puedes ver que el fútbol chileno creció mucho durante los últimos años. Tuvieron muy mala suerte de no alcanzar las semifinales en el Mundial”.